Aunque se asume que el té oolong y el té verde tienen grandes beneficios para la salud debido a los antioxidantes, también es cierto que contienen cafeína. Está bastante establecido que las mujeres embarazadas no deben tomar cafeína, o deben reducir su consumo drásticamente en el caso de que fueran grandes consumidoras antes del embarazo. Por término medio, una taza de té contiene entre 40 y 50 miligramos de cafeína. Los tés descafeinados, todavía contienen una pequeña cantidad de cafeína: unos cuatro miligramos.
La cafeína atraviesa la barrera placentaria, por lo que alcanza a su bebé en desarrollo. Pero el feto no tiene la capacidad de metabolizar la cafeína que tienen los adultos. Por esta razón, existe mucha controversia sobre cuánta cafeína es segura para una mujer embarazada, o si debe eliminarse totalmente de la dieta durante el embarazo. Se sabe que cuanto menos cafeína se tome durante el embarazo, mejor.
Los tés oolong son una combinación del té verde con el té negro. Por lo tanto, este tipo de té contiene una cantidad variable de cafeína y de antioxidantes. Cuanto más largo es el tiempo de fermentación (oxidación), más cafeína contiene el té. El té oolong es también conocido como té azul.
Por otro lado, las últimas investigaciones indican que el té oolong y el té verde pueden disminuir los niveles de ácido fólico, lo cual puede ser muy perjudicial en el caso de las embarazadas. El ácido fólico es absolutamente esencial para la síntesis del ADN, su reparación y la reproducción celular. Se necesitan los folatos para la prevención de los defectos del tubo neural, la restricción del crecimiento fetal intrauterino y la preeclampsia, antes del y durante todo el embarazo. Así, la cantidad recomendada de folatos durante el embarazo es de 440 microgramos por día, que es aproximadamente la mitad de las necesidades de una mujer no embarazada.
Durante el embarazo es importante aumentar el consumo de productos que tienen ácido fólico, a la vez que disminuir el consumo de aquellos productos que lo disminuyen, como por ejemplo el tabaco.
Recientemente, el epigalocatequín galato, que es una catequina presente en el té oolong y en el té verde, se ha visto que interfiere con el metabolismo del ácido fólico. En un estudio realizado en un hospital de Tokio, se determinó si el consumo de té verde o de té oolong se asociaba con los niveles circulantes de folatos en las mujeres embarazadas. El estudio mostró una asociación entre consumos elevados de té oolong o de té verde y niveles bajos de folatos durante el embarazo.
El estudio sugiere que las sustancias que contienen los tés oolong y verde, pero no las que contiene el té negro están asociadas con niveles bajos de ácido fólico. A pesar de que el estudio tiene diversas limitaciones y, por ello, los resultados deberían ser examinados en estudios más grandes, existen varias implicaciones clínicas útiles:
Un comsumo elevado de té verde o de té oolong se asoció con niveles bajos de folatos en mujeres embarazadas sanas, después de ajustar por diversas variables de confusión (lo cual aporta credibilidad a los resultados). Esta relación entre el consumo de té verde o de té oolong y los folatos, puede estar detrás de la explicación de por qué beber té durante el embarazo se asocia a resultados perinatales adversos.